Cambios de uso de suelo en Tabasco en respuesta al cambio climático

Las comunidades costeras salinizadas de Cárdenas, Comalcalco y Paraíso, sustituyeron diametralmente su forma de vida, pues el hábitat se transformó. Allí dejaron de ser ganaderos y agricultores, para pasar a pescadores y productores de mangle.

La investigadora de la Fundación Los Hijos de la Tierra, Susana Fallas Barquero, sostiene que este fenómeno “es un proceso de adaptación -literal- al cambio climático”.

smCita el ejemplo la ranchería Río Playa, Comalcalco, donde sus pobladores antes eran agricultores y productores de ganado y ordeñaban, pero se salinizó la tierra y todo se convirtió en manglar.

Al llegar la salinización, en lo que antes fueron potreros, ya no pudieron tener una vaca, tampoco sembrar absolutamente nada de lo que acostumbraban.

Con el proceso de salinización lo que sucede es que la población de esa zonas que están acostumbradas a vivir de la agricultura o de la ganadería, ven mermadas sus actividades ya que el suelo no es el apto.

Empiezan a tener invasión de otras especies, como por ejemplo cangrejos, que incluso le comen sus cultivos, sacan hasta las semillas, se comen los pollitos. Entonces les cambia todo su esquema de vida.

Donde antes era agricultores o recolectores de subsistencia, tienen que empezar a modificar su vida y a convertir en su principal actividad la pesca. Fue entonces cuando los pobladores se tuvieron que convertir en pescadores de  zonas salinizadas.

Este cambio climático también generó un problema de salud, pues la gente no estaba acostumbrada a vivir con esa cantidad de salitre.

Y las herramientas de trabajo las empezaron a cambiar. Antes tenían caballos para ir a buscar el ganado, y en lugar de tener la soga, lías y las cercas, empezaron a buscar lanchas, motores y gasolina.

Tuvieron que aprender a reparar un motor, una lancha, cómo se elaboraban las redes y cómo se pescaba.

LES DAN APOYO

La Fundación Los Hijos de la Tierra estuvo presente en una etapa inicial de este fenómeno que vivieron estas comunidades. Cuando apenas buscaban apoyo, ayuda, incluso fueron a apoyar a sembrar mangle, porque era lo único que se daba.

Decían que si ya sólo se daba el mangle, entonces “tratemos de buscar si se siembra y qué hacer”, recuerda la investigadora social.

Igual al invadir el salitre la zona, ocurrieron problemas con la infraestructura de viviendas de la comunidad en general. Empezó a cambiar el ambiente, el microclima de la zona y a tener problemas con la infraestructura del guano. Por la cantidad de humedad, ahora se pudre más que antes y también necesita mayor mantenimiento.

Es evidente los cambios paulatinos que sufrirá nuestro Estado, estos seguirán respondiendo a las acciones antropocéntricas.

Deja un comentario